Todos estamos sujetos al destino, pero debemos hacer como si no fuera así o morir de desesperación. Hay una curiosa profecía acerca de esta niña: está destinada a provocar el final del destino. Pero debe hacerlo sin saber lo que hace, como si obrara por su propia voluntad, no porque éste sea su destino.
Serafina Pekkala
domingo, 23 de diciembre de 2007
La sabiduría de la reina de las brujas
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